jueves, 8 de enero de 2009

Hace frrrríoo

Pues sí, peralimoneros que me quieran oir, o yo mimma, hace muuuuucho frrrríiiioooo fuerrra. Menos de 1 grado, con hielo e hilos de nieve a nivel del mar, servidora es más que feliz. Anoche se adivinaba la delgada capa blanca sobre las colinas, volviendo para Castro. Relumbraba con los faros y la luna. Cuando llegué a casa, un par de patinazos en mi cuesta me recordaron que el hielo no es amigo de los candidatos a romperse el culo contra la acera. Anoche bajaban también los coches de la Arboleda con una capa interesante. Si hay nieve el sábado subiremos en el funi a disparar como locos con polarizadores y botas de monte.
Ojalá nevara hasta jartar. La nieve lo dignifica todo, lo ilumina todo; nos cuaja los árboles, la hierba, el cemento. Es estética a más no poder. Bella. A disfrutar. Me voy al breafing.

jueves, 27 de noviembre de 2008

frikada guapa!

Estimados...
yo no soy friki al estilo de donde acabamos de retornar la compañera rizos y servidora. Nosotros no llevamos jerseis del newyorker (había alguno churfer tipo billabong, pero poco más), chamarras de esas de cremalleras dadas de sí, barbas de contestatarios y ausencia total de elegancia y distinción, excepto alguna perlas, como por ejemplo, la persona género masculino que estaba sentado al lado mío que estaba bien bueno y bien vestido aunque con tic persistente de cuello hacia nosotras que le hacía un poco molesto.
Ahora pienso que lo mismo le llamamos la atención por nuestro aura karma-jarrll que claramente brillaba entre tanto joven dueño del mundo, informáticos y telecos impacientes por codificar y hacer incomprensible una parte fundamental de la vida de todos (me da igual máquinas-tragaperras, sacacafes, braintrainings o muñecos parlantes genios del management ético jesuítico)
El profe, un sobrao formado -por lo que se pudo intuir- en el departamento gráfico de algún periódico y después en factorías de coches, contaminado por el método de producción industrial (que sirve para fabricarlo todo, desde un toyota hasta una gominola, pasando por condones, biblias o bolsas de arroz la Fallera) o incluso personas, es un nazi pseudo-tecnócrata, cuantitativista positivista y cientifista (documentos, hechos, datos, ñaka, ñaka) que opina que en el diseño todo tiene un objetivo (cierto) normalizado (cierto), pero desapasionado, sin intuición, sin creatividad ni empatía con el cliente / usuario final (ERROR, EHH!)
Humildemente, desde mi condición de humanista (que sí, coño, como todos nosotros) y esperiencia en servicios culturales (queda bien eso?) y en mi acercamiento / intrusismo en el campo tecnológico softweriano pienso que en la coctelera del éxito del software y del análisis funcional hay que dejar un rinconcito para el alma, señor, para esa conexión que hace que te enganche un tío que habla de puta madre de lo que bien sabe, con mesura y respeto a sus alumnos, y un anormal que pesa 50 kilos menos que el anterior en carne, pero está sobrao de soberbia y de profesor tiene lo que yo de dantzari vasca despelotada.
Hablando de ello, es como los calendarios: entre vascos y vascas dando saltitos y tapándose las vergüenzas con boinas rojas o retozando tras el akellarre en el hayedo, o las tabletitas bien marcadas por las luces y sombras de los bomberos de Castro, pues eso....

A ver esos comentarios, guapeton@s...

lunes, 24 de noviembre de 2008

Batitis aguda

Espíritus anti-sistema, anti-orden y anti-normalización, destruid, machacad, quemad!! las jodidas batas de mierda que tiran de la sisa y nos convierten en maixus o enfermeritas con  ganas de despendole y curvitas deseables a ojos de usuarios libidinosos y pringosos! O peor, en esas de blanco, da igual lo que hagan, que se mueven al unísono como las muñecas de famosa

¡no señores, NO!

Decidida a cambiar el mundo y salir del encorsetamiento blanco-blanquísimo, servidora propone un sistema de batas combinable con cargo y estado de ánimo para cada momento. El patronaje muy moderno, eso sí, con varias pinzas de
 esas que marcan la cintura sin mollas, y botones ocultos de los de soltar haciendo rrracca!, para esos momentos de sofoco y mala hostia, las solapitas bien almidonadas, en plan chimenea, que estilizan y hacen más fashion...

Reinvindico la bata Cameron (ya tenía una pero encogió -no sus compreis
 una whirlpool-) y ahora no me cabe comodamente, puede que sea mi cuerpo, no cabe duda, pero oyes, que me tira de la sisa; la bata de Bones no me gusta porque es de forense azul mahón, sin formas, muy feota; algunas otr
as batas, como por ejemplo, la famosa bata de  cola de la Pantoja, la pantobata, pues la verdad, hay que saber lleval-la, que pesa mucho y hay que pegar la revuelta con garbo, con un sujetar de peineta y el rizo pegao; y la de Falete ni hablamos. Yo, si me tengo que poner de mi 1/3 andalúz, me quedo con las de Vicki Martín Berrocal, que son mu shulas, mu sevillanas, mu flamencas, aunque en algunas (si veis la ristra de fotos del enlace) haya que taparse la cuca y los timbres para no parecer muy descucada, vaya, o bien ponerse la tradicional esta nuestra bata por encima, para evitar desvanecimientos y subidas de tensión con embolia entre el personal investigador.

En fín, que lo que cabe esperar, después de toda esta mandanga, es que debajo de la bata blanca inmaculada no se esconda el lobo cabrón con los dientes como sables o la raposa tiñosa comeconejos , sino el dulce y tierno corderito de norit que todas y todos llevamos dentro.